Para esos días en los que estás en casa y te apetece algo dulce, te recomiendo encarecidamente que hagas estos muffins de chocolate, es que tienes que probarlos porque están buenísimos y quedan súper esponjosos.
La masa del muffin de chocolate se parece bastante a una magdalena o a un bizcocho. Y a veces pasa que, aunque sigas la receta, te queda una masa apelmazada, seca y que encima se agrieta por encima.
Para que eso no te pase y te queden unos muffins de chocolate perfectos, toma nota de los consejos que te voy a dar y que puedes aplicar también para cuando prepares bizcochos.
Consejos para que salga un muffin de chocolate perfecto
Lo más importante que debes tener en cuenta cuando prepares los muffins de chocolate es seguir los pasos de la receta al pie de la letra.
A veces pasa que cambias la cantidad de algún ingrediente sin darte cuenta y ya la has liado, porque ese pequeño detalle va a influir en el resultado y no te va a quedar igual que la receta original.
Los ingredientes que uses para preparar los muffins de chocolate han de estar a temperatura ambiente, ya que si añades algún ingrediente frío podría cortar el proceso químico.
Cuando bates los huevos debes airearlos, es decir, batirlos bien hasta que parezcan una mousse blanquecina. Con este paso los huevos cogerán aire y conseguirás que los muffins de chocolate queden súper esponjosos.
Para hacer los muffins de chocolate usa una harina suave que contenga menos cantidad de gluten, así tendrán una mejor consistencia.
También es importante tener en cuenta que tanto en la elaboración de este dulce como de los bizcochos, siempre has de tamizar la harina y simplemente mezclar con el resto de ingredientes. Si sobrebates la mezcla, el resultado será un muffin de chocolate apelmazado y eso no es lo que quieres.
Y por supuesto debes tener en cuenta que cada horno es un mundo y que en el mío 10 minutos a 180º no es lo mismo que en el tuyo, aunque pongas misma temperatura y tiempo. Por lo que es importante que conozcas tu horno.
Antes de meter los muffins de chocolate al horno debes precalentarlo y siempre a una temperatura un poco más alta de la que vas a hornearlos para no perder temperatura al abrir el horno.
Y nunca te pases de cocción. Este es uno de los motivos por los que los muffins o bizcochos quedan secos y se agrietan.
Después de todos estos consejos, estoy segura de que te van a quedar unos muffins de chocolate perfectos. Y recuerda, esto también lo puedes aplicar si haces un bizcocho.
Dicho esto, empecemos a preparar la receta.
Receta de muffins de chocolate
Pon el horno a precalentar a 200º grados, luego lo bajas a 180º, que es la temperatura que necesitas para hornear los muffins.
En un bol amplio bate los huevos uno a uno durante al menos 5 minutos o hasta que veas que quedan blanquecinos.
Echa el azúcar y sigue batiendo durante 2 minutos, hasta conseguir que ambos ingredientes queden bien integrados.
Añade el aceite, la esencia de vainilla, el yogur y bate.
Tamiza la harina, el cacao y lo incorporas al resto, solo tienes que mezclar y no batir en exceso.
En un cuenco pequeño pon las chispas de chocolate y las mezclas con una pizca de harina, así evitas que se vayan al fondo.
Forra con tulipas para muffins el molde y con ayuda de un sacabolas de helado rellena cada una de ellas con la mezcla. Si quieres que te queden grandes como las mías, rellena un poco más de ¾ de su capacidad, que es lo aconsejable.
Trocea un poco de chocolate negro, añade unos trozos encima de cada muffin y lo llevas al horno a 180º entre 15/20 minutos, dependerá de vuestro horno. Pasado ese tiempo pincha con un palillo y si sale mojado lo dejas unos minutos más.
Sácalos del horno y déjalos encima de una rejilla para que se enfríen.
Cuando estén fríos o templados si te gustan así, desmolda y ya puedes disfrutar de unos muffins de chocolate esponjosos y buenísimos.
Abajo te dejo la receta en fotos para que te sea más fácil seguir los pasos.
Los muffins de chocolate son perfectos como desayuno o merienda acompañando una taza de té o de café, al igual que las cookies de chocolate.
Para que te duren esponjosos los puedes guardar en un táper bien cerrado y te van a aguantar hasta 4 días sin que se queden secos.
Espero que cuando hagas esta receta me comentes qué tal te ha salido, me encantará leérte.
¡Buen provecho, familia!