La sopa de galets o también conocida como escudella de Nadal, es una especialidad tradicional de Cataluña. Una receta que se inspira en las famosas pelotas de carne que acompañan los cocidos.
La sopa de galets se prepara con un tipo de pasta específico que se llama así: galets. Este tipo de pasta tiene forma de caracola y es de tamaño grande. Suele rellenarse con la carne de la pelota aunque también se suele comer sin relleno.
La sopa de galets surgió como variante de la escudella. Los campesinos preparaban platos contundentes que les ayudase a combatir las frías jornadas de trabajo en invierno.
Para preparar el caldo de la escudella usaban distintos tipos de carnes y añadían variedad de verduras. Tradicionalmente, a la sopa que se hacía con este caldo se le añadían fideos.
A principios del siglo XX, en Barcelona en la época de Navidad, se preparaba una sopa con un tipo de pasta parecida al macarrón acompañada de queso rallado por encima.
Hay diversas fuentes que aseguran que el inventor de la pasta de galets fué Tomás Guinovart, un empresario que fue a Barcelona a pasar las fechas de Navidad con unos amigos. Dicen que esta receta le encantó pero la pasta, al tener forma de macarrón y cogerla con la cuchara se le escurría.
Al ser fabricante pensó en un tipo de pasta que fuese redondeada y cómoda para coger con la cuchara. Así que creó unos macarrones grandes a los que les dió forma de esfera.
Cuando amigos y familia probaron esta nueva pasta, fué todo un éxito.
Como suele pasar con la mayoría de recetas, con el paso del tiempo a alguien se le ocurrió rellenar los galets y hacer una variante de la receta de sopa de galets.
La sopa de galets, junto con la escudella, es uno de los platos tradicionales que se come en Cataluña en Navidad.
Cómo preparar la sopa de galets
La sopa de galets se hace con el caldo de la escudella y para rellenar los galets se puede usar carne picada o bien hacer el mismo relleno que para hacer la pelota.
Yo he usado la pelota que tenía porque el sabor no se puede comparar, queda mucho más rico.
Para preparar el relleno de la sopa de galets has de quitar la tripa de la butifarra. Pon la carne en un cuenco junto con la carne picada de ternera.
Pela un ajo y pícalo bien pequeño. Haz lo mismo con el perejil y agrega ambas cosas al cuenco donde está la carne.
En un bol a parte pon leche y remoja una rebanada de pan de molde sin corteza. Dale unas vueltas con una cuchara hasta conseguir que empape bien toda la leche y quede el pan como una papilla. Añádelo a la carne.
Agrega nuez moscada, sal, pimienta negra molida. canela en polvo y un huevo.
Por último añade el pan rallado y unos cuantos piñones, que son opcionales.
Con las manos bien limpias mezcla todos los ingredientes hasta formar una masa algo compacta.
Pon la masa en una manga pastelera sin boquilla. Hazle un corte con las tijeras a la punta de la manga pastelera.
Coge un galet y rellena con la carne. Séllalo con un poco de pan rallado.
En una olla al fuego pon el caldo de la escudella y deja que se caliente. Ten en cuenta que la pasta de galets tarda más en cocinarse que otros tipos de pasta. Por lo menos va a necesitar 15 minutos. La pasta, al cocinarse, absorbe líquido y es posible que veas que la sopa de galets se queda algo seca de caldo.
Una opción sería cocer la pasta en agua al menos la mitad del tiempo de cocción que necesita. O puedes añadir más cantidad de caldo e ir agregando a medida que la sopa de galets se va cocinando. Si optas por esta última opción, procura que el caldo que agregues esté caliente para no romper la cocción de la sopa.
Cuando el caldo rompa a hervir añade los galets. Al ir rellenos calcula unos 6 o 7 por persona.
Remueve para que no se peguen entre sí y deja cocinar el tiempo que marque el envoltorio.
Cuando la pasta esté cocida, sírvela en un plato y come caliente.
En las fiestas de Navidad se le da mucha importancia a la comida. Parece que en esas fechas sólo se piensa en qué comer. Las ideas se acaban y uno ya no sabe qué cocinar.
Un entrante que va a gustar a todos es la sopa de galets. Un plato caliente que en los fríos días de Navidad arregla el cuerpo.
Si te gusta probar cosas nuevas y quieres salirte de lo mismo de cada año, como sugerencias para servir esos días tienes la caldereta de cordero o la merluza en salsa verde.
¡Buen provecho, familia!